O estoy o no estoy

Estoy en el lugar que eligieron para mí mas no en el que me tocó vivir. Si bien es verdad que aquí también soy feliz eso no quiere decir que para siempre me quiera quedar yo a vivir aquí. La tristeza me llega de repente, como el aire que por mi ventana se mete. Me susurra al oído las alegrías que pasábamos cuando niños.

Mi mente vuela y llega a la casa de la abuela. Entonces la nostalgia llega y me dice vamos a esa vida tan bella donde la alegría es tan brillante como una estrella. Me agarro fuerte de su mano y paso por mis hermanos. Llegamos a casa de la abuela donde ya los demás nietos nos esperan. Por fin estoy en el lugar que me tocó vivir y no en el que elijaron para mí.

Río sin parar y me siento tan feliz que siento que el mundo y su belleza solo se hicieron para mí. El olor a tierra mojada por la lluvia hace que mi alma de felicidad se inunde. Soy feliz pues nada me falta aquí porque es aquí donde a mí me tocó vivir. Pero al llegar la noche cuando todo está en silencio, recuerdo y extraño las cosas de ese otro lugar.

Si, extraño las cosas del lugar que no me tocó vivir pero que eligieron para mí. Entonces tomo yo a la nostalgia de la mano y una vez más paso por mis hermanos. Juntos volamos al lugar donde la mitad de nuestras vidas ya está hecha. Donde nuestras familias que formamos nos esperan y todo siempre es como en primavera.

Sonrió nuevamente pues ellos mi nueva familia son mi luna creciente. La razón por que amo el lugar que eligieron para mí. Pues es en este lugar que encontré a quien me hace feliz y donde vive y nació quien Dios destinó que mí vida haga feliz. Este lugar que no es donde me tocó vivir pero que amo porque es aquí donde viven quienes son mi luna creciente, aunque yo soy más de un sol ardiente.

Soy de donde sale el sol anunciando un nuevo día y el calor te dice párate que ya es de día. Donde los gritos de los vendedores en la calle te dicen de lo lindo que es esta vida. Soy de donde se cosecha la fruta fresca que encuentras en los puestos del mercado cada día. Donde los ancianos son el tesoro más preciado y mejor cuidado.

Vivo en un lugar donde no canta el gallo al amanecer y el frio te dice vuelve a la cama otra vez. Dividida mi alma está, porque amo a este y al otro lugar. No soy completamente feliz cuando vivo a aquí pero sí que extraño volver cuando estoy allá. Entonces regresa esa pregunta que me hago por tiempo cuando extraño el lugar en el que no estoy pero que me gustaría estar. ¿O estoy o no estoy? ¿Dónde está mi alma hoy?

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